Las mareas rojas son brotes masivos de ciertas especies de algas microscópicas que producen una potente toxina que puede ser peligrosa para los seres humanos y los animales marinos. Inhalar, tragar o tener contacto a través de la piel con estas toxinas puede producir enfermedades graves y potencialmente mortales a los seres humanos. Los síntomas incluyen diarrea, náuseas, vómito, dolores abdominales y escalofríos, entre muchos otros. Las mareas rojas han matado delfines y manatíes en la Florida, y también se sospecha que son la causa de muertes de tortugas marinas y ballenas.
Las mareas rojas se están haciendo cada vez más comunes en la Florida y otras partes del Golfo de México, pero parecen haber empeorado por una sobrecarga de nutrientes en el agua, acarreados por aguas residuales sin tratamiento adecuado, desechos agrícolas y escurrimientos de fertilizantes.