En medio de la polémica desatada entre integrantes
de la comunidad científica local y el gobierno municipal
como consecuencia de la difusión de una tesis
doctoral que da cuenta del alto grado de contaminación
existente en la zona de la planta del efluente
cloacal, el Dr. Federico Isla, profesional del Centro
de Geología de Costas de la Universidad Naciona
l de Mar del Plata e Investigador del CONICET,
analizó en declaraciones a 0223.com.ar que
“es lamentable que esto haya surgido ahora”,
aunque remarcó que “el problema viene
desde hace mucho y está latente desde hace
un tiempo”. “Hemos hecho en el año ’96 un
estudio del área en donde va a funcionar
el emisario submarino y me acuerdo que
decíamos que ojalan esto no tardara 10
años en resolverse, y demoró 12; espero que
esto se resuelva”, señaló.
Asimismo, advirtió que una vez concluida
la obra del emisario “es fundamental
no descuidarse porque hay otros lugares donde
están los fluviales y hay que tratar de minimizar
el grado de efluentes de drenajes de las calles
sucias que pueden estar llegando a zonas de
baño”.
“La contaminación está donde está la gente:
mediciones del año ’99 indicaban que a 40
centímetros del agua, en donde había más
gente, es donde más sucia estaba el agua.
Lamentablemente esto no se soluciona si el
turista, que hace uso y abuso de las playas,
no toma conciencia de que tiene que ser má
s limpia; además de que el marplatense tiene
que trabajar todo el año para mejorar la calidad
sanitaria”, aseveró.
En tanto, en relación a los duros cuestionamientos
que el gobierno municipal destinó a los doctores
Elías y Vallarino, autores de la tesis sobre la
contaminación de la costa marplatense, Isla
sostuvo: “Yo los conozco y no hay ninguna mala
intención en su trabajo que consiste en ir en
pleno invierno a aguas que no son las
más aptas para medir la contaminación y observar
hasta dónde se extiende”. “Ellos ven que hicieron
algo que les demandó muchísimo esfuerzo y las
autoridades, en lugar de apañarlos, se la
agarran con ellos. Yo puedo asegurar que hacer
ese tipo de campaña, juntar gusanos que
crecen en las rocas, no es el mejor trabajo que
hacen los biólogos”, subrayó.
En ese sentido, el científico reparó en que “ya ha
pasado que los trabajos que hacen las personas
mejores intencionadas en pos de mejorar la
comunidad son tomadas después como una
cuestión política”, tras lo cual enfatizó: “Entonces,
si va a haber este tipo de reprimenda o tirón de orejas
para alguien que hace algo tratando de beneficiar
ala comunidad, más vale que nos quedemos en el
laboratorio, escribamos nuestros trabajos y que
el mundo de afuera siga funcionando igual y no
lo podamos cambiar para mejor y esa no es la idea”.
“Nuestro trabajo tiene como objetivo una ecuación:
aumentar la riqueza, disminuir la pobreza y
mantener la las condiciones ambientales. Yo
he visto desaparecer muchas playas por la erosión
costera y puedo asegurar que el riesgo de deterioro
es mucho mayor que hace 30 años atrás”, dijo po
r último. |